LOS PATERNAIN DE ANTAÑO. SIGLO XVII. CURIOSIDADES

   Siguiendo las pautas de esta permanente comunicación de los "Pater, Mendaza y....", siempre hemos sentido curiosidad por conocer nuestros orígenes y el lugar donde antiguamente nacieron y vivieron nuestros antepasados. A través de un magnífico documento que realizó en los Archivos Diocesanos de Pamplona un religioso capuchino de la familia Paternain, hemos podido verificar el desarrollo y la trayectoria de las últimas 12 generaciones, así como el asentamiento de muchas de ellas por la variada geografía de la Comunidad Foral de Navarra, de España, y de otras partes del Mundo.

   En nuestra ilusión por indagar la situación de nuestros ascendientes y del lugar donde tenemos conocimiento que habitaban, me llevó a estudiar los documentos que hacen referencia a nuestra familia originaria y que existen guardados en el Archivo Real y General de Navarra, situado en el Antiguo Palacio de los Reyes de Navarra.

Portada de la documentación del proceso
Fecha final del proceso. Numero documental.

   Entrando en su documentación, a través del nombre Thomás de Paternain del lugar de Paternain, he conocido varios documentos muy interesantes que relatan sucesos vividos por nuestra antigua familia en el siglo XVII. Una documentación que ha llamado mi atención y que he podido estudiar con verdadero apasionamiento aunque con notable dificultad, corresponde a un compendio de 153 hojas documentales en los que se recoge el desarrollo de un proceso sobre derechos de una heredad.
   Tanto María Joan de Lezáun mujer de Juan Urra de Riezu, vecinos del lugar de Riezu, como María de Lezáun mujer de Thomás de Paternain vecinos de Paternain, entran en litigio para recuperar los bienes de herencia de su padre Joan García de Lezáun, sitos en el lugar de Paternain. Este proceso se inicia con fecha de 9 de enero de 1610 y concluye el 23 de marzo de 1611.
   Los bienes en discusión pertenecían a una familia importante del lugar de Paternain, la formada por Joan García de Lezáun,casado con María Ximenez de Ororbia vecinos de dicho lugar, que habían tenido cuatro hijos: el hijo mayor y heredero Joan García de Lezáun había fallecido en Paternain  a la edad de 27 años, María de Lezáun casada con Thomas de Paternain, María Joan de Lezáun casada con Juan Urra de Riezu, y por último María Antonia de Lezáun doncella, vecina de Paternain.
   El pleito se plantea a la muerte del citado hijo único y varón Joan García de Lazáun sin descendencia y la intervención de Valentín de Lezaun abad de Paternain y Francés de Lezaun, tíos de los herederos, reclamando los bienes para María Joan de Lezaun y su marido, en perjuicio de María de Lezaun esposa de Thomás de Paternain.
   Los bienes de la heredad son importantes según se relacionan ampliamente en los documentos que se aportan, los más importantes serían: dos casas en el lugar de Paternain, campos de labor de unas 16 robadas, 10 peonadas de viña, árboles frutales, varias cabezas de ganado y objetos de oro y plata entre los ajuares del hogar, con un valor aproximado, según valoración documental de 3000 ducados, moneda de uso en Navarra.

Documento solicitando al abad Valentín de
Lezaun, el libro bautismal del lugar de Paternayn

   En el proceso, se aportan las razones de una y otra parte, presentadas por sus respectivos procuradores, en las que se basan para determinar a la muerte del heredero, cual de las hermanas es según el testamento original  la heredera de todas las propiedades.
   Por la documentación consultada, parece ser que en el documento del libro del bautismo  de las hermanas herederas del lugar de Paternain aparece la inscripción de María de Lezaun, esposa de Thomás de Paternain, y no aparece la de María Joan de Lezaun, esposa de Juan Urra de Riezu, vecinos del lugar de Riezu. El abad de Paternain, Valentín de Lezaun, ha sido en vida del heredero Joan García de Lezaun, su sobrino, administrador de todas los bienes heredados. A la muerte prematura de Joan sin descendencia y sin haber modificado el testamento de su padre, se le solicitan al albacea y administrador como responsable del libro bautismal, entregue los documentos  que acrediten la primacía de María Joan sobre su hermana María. Esta verificación la solicita Thomás de Paternain,esposo de María, ya que el administrador y abad Valentín de Lezaun, se ha declarado en favor de María Joan y de su marido vecinos de Riezu como los legítimos herederos. Es también favorable a esta designación la viuda y madre María Ximenez que se ha vuelto a desposar en el lugar de Riezu.
   A través de un proceso muy  complejo, en donde se aportan declaraciones de todas las personas involucradas, así como de los testigos de una y de otra parte, recogidos en un volumen importante de documentos, hay una valorada resolución final del conflicto.



Documento del proceso. Se puede apreciar,
la elegancia de su letra caligráfica.

    El documento en su encabezamiento," invoca al rey don Philipe por la gracia de Dios rey de Castilla, de Navarra,....", después de una serie "compromisos, condiciones, notificaciones, memoriales", se detalla una sentencia, en la que se declara en justicia, heredera universal a María de Lezaun, esposa de Thomás de Paternain, de todos los bienes de sus progenitores, su padre Joan García de Lezaun y de su hermano.
   En estos documentos, también se refleja la condena al citado abad de Paternain, Valentín de Lezaun, a su hermano Francés de Lezaun y a su fiador Francés Pérez de Larraya vecino de Larraya al pago de 235 ducados por la utilización de la heredad, desde la muerte de Joan García su sobrino, hasta la fecha de la sentencia final. Por parte en la defensa del abad, se interponen una serie de alegaciones, negándose a la entrega de los bienes que administraba, pero en ningún documento presentado, pese a solicitarlo el tribunal, se reflejaba la primacía de María Joan de Lezaun  sobre María de Lezaun.
   Un documento recoge el procedimiento de solicitud de embargo y subasta de una serie de bienes que el abad tiene depositados en la heredad objeto de litigio, como pago de los 235 ducados que se le reclaman en la resolución final.
   Otro documento final recoge como un nuevo fiador Joanes de Cildoz vecino del lugar de Cildoz, el beneficiario de la Iglesia Parroquial de Aztariain y Pedro de Undiano dan satisfacción a la deuda reclamada a Valentín de Lezaun, abad de Paternain.
   Terminado y resuelto el proceso, los bienes heredados por María de Lezaun importantes y los propios de Thomás de Paternain también cuantiosos, pasan a tener unos mismos dueños. Según documentos
 posteriores a esta heredad conjunta, se la denominará casa patrimonial "Tomasena".

   Destacaremos en esta documentación la variedad de léxico en la literatura de la época y la variedad de morfología y letras caligráficas que se emplean en los legajos del sumario. Tanto relatores, notarios, procuradores, escribanos y otros funcionarios, desempeñan una labor esencial en la resolucion de estos litigios. El conocimiento de la historia de la familia de los Paternain en su asentamiento, y en los inicios del siglo XVII, ha sido una experiencia muy interesante.